Gran parte de nuestra vida transcurre mientras dormimos, sin embargo no tenemos en cuenta estas horas como un recurso clave para mejorar nuestra salud.
Aprende algunos trucos para aprovechar ese tiempo, que incluso si respetas en el tiempo, ¡te harán sentir más joven cuando te levantes!
Beneficios de dormir bien y de manera correcta
1. Dormir sube tus defensas
Quienes duermen una mayor cantidad de horas son menos propensos a enfermarse ya que tienen sus defensas altas. Quienes duermen poco tienen mayor tendencia a estar deprimidos y son más vulnerables a las enfermedades.
2. Cuando duermes se ejercita la mente
Una noche de sueño reparador mejora las habilidades de aprendizaje y permite incorporar mejor el conocimiento.
3. El exceso también es perjudicial
Dormir pocas horas por noche puede ser perjudicial para la salud, pero dormir en exceso tampoco es saludable y puede ser indicador de alguna enfermedad.
4. Dormir hace bien al corazón
Según expertos, una siesta diaria de 45 minutos beneficia al sistema cardiovascular ya que la presión arterial se mantiene más baja y se reducen los problemas de hipertensión.
5. Cuando dormimos seguimos trabajando
Cuando duermes en tu cuerpo se activa la melatonina, una hormona que trabaja por ti. Su secreción regula el reloj biológico, previene la obesidad y la diabetes, retrasa el envejecimiento, tiene funciones antioxidantes y antiinflamatorias.
6. Dormir adelgaza
La leptina es la hormona encargada de enviar al cerebro la sensación de saciedad. Si no duermes bien, sus niveles se reducen al mismo tiempo que aumentan los niveles de grelina, la hormona encargada de estimular el apetito. En consecuencia, si no duermes bien sentirás más ganas de comer.
7. Cuando duermes se equilibran las hormonas
Dormir bien ayuda a segregar la hormona del crecimiento que tiene un papel principal en el proceso anti-edad.
8. El sueño es un rejuvenecedor de la piel
Durante el descanso la piel realiza un trabajo de renovación y reparación. El estrógeno -la hormona responsable del crecimiento del cabello, que ayuda a conservar la firmeza de la piel y prevenir la aparición temprana de las arrugas- alcanza sus niveles más altos durante el sueño.
El sueño también induce la producción del colágeno que forma una barrera en la piel frente a sustancias tóxicas, ayuda a mantener la piel hidratada y es también responsable de la elasticidad y firmeza de la piel.