Es momento de reuniones familiares o con amigos donde la comida siempre aparece en primer plano. Pero para quienes están buscando bajar o mantener su peso, o bien simplemente quieren cuidarse, pueden representar un desafío porque en general hay más comida que lo habitual y se come de más.
Aunque es una ocasión especial y puedes permitirte algunos gustos, es bueno saber cuándo parar. ¿Cómo hacer para medirse si hay mucha comida y no terminar en una indigestión? ¡Lee estos consejos y disfruta de las fiestas sin pasarla mal! ¿La clave? La misma que para muchas otras cosas: ¡equilibrio!
Claves para no excederse en las comidas
1. Prepara tu propia comida
Este consejo es clave porque en las reuniones puedes encontrarte con una mesa donde tengas frente a ti todo lo que estás tratando de evitar. Por eso, lo mejor es que lleves tus propias cosas. Cocina y lleva algo que hayas hecho tú o sepas qué contiene, y que al mismo tiempo puedas compartir. Quizás con esto también ayudas a que los demás empiecen a comer más saludable, y tú evitarás sentirte tan tentado por todo lo que usualmente no comes.
2. Toma agua antes de comer
Esto puede ayudarte a que te sientas más satisfecho y no tengas tanta ansiedad a la hora de comer. Además de que te ayudará, también, a hidratarte bien. Recuerda que a veces la sed puede confundirse con el hambre.
3. Merienda
A veces, algunas personas que ya saben que tendrán una cena importante de noche, evitan merendar, y esto puede ser contraproducente. Porque puede que llegues con mucha hambre a la cena y comas de más.
4. Sírvete en un plato
A veces, en las reuniones abundan los snacks que, como se comen "picando", mientras se habla, podemos a llegar a perder noción de las cantidades. Por eso, una buena forma de no excedernos es servirnos en un plato, en lo posible, pequeño.
5. Busca variedad
Si hay mucha comida, elige con conciencia, buscando la variedad. Come proteínas, vegetales, crudo y cocido. Balancea. Ésa es la clave para una comida rica y nutritiva.
6. Come despacio
Uno de los errores más comunes es comer con ansiedad. Esto puede pasarte si no has comido bien a lo largo del día o si tienes frente a ti una mesa con comida que no sueles comer a diario. Tranquilo. Respira y disfruta. Comer debe traerte placer y bienestar, no molestias al día siguiente. Disfruta del momento.
7. Bebe con moderación
En las fiestas las bebidas alcohólicas suelen estar más que nunca, como cualquier otra celebración. No excederte no implica directamente no tomar, pero sí hacerlo con moderación. El alcohol combinado con la comida puede generarte hinchazón o molestar gástrico, o bien hacerte perder la cuenta de cuánto comes. ¡Ni que hablar del dolor de cabeza al día siguiente!
8. No te castigues ni obsesiones
Las fiestas son un momento para celebrar, por eso, no te castigues ni te obsesiones. Puedes disfrutar y permitirte algunas cosas que no comerías en tu día a día; la clave está en el equilibrio y la conciencia. Disfruta respetándote y cuidándote a ti y a tu cuerpo. Esa es una forma de amor propio.