La lluvia de estrellas de las Perseidas es un evento que ocurre todos los años a mediados de agosto. Se trata de una gran lluvia de meteoritos o estrellas fugaces que puede observarse a simple vista desde la Tierra, sobre todo desde el hemisferio norte.
Las "estrellas caídas" que se observan son los restos del cometa Swift-Tuttle que rodea al Sol en un período de 130 años. En agosto, la órbita de la Tierra coincide con la del cometa, por eso los meteoros penetran nuestra atmósfera y dan lugar al espectáculo. El nombre se debe a que, visualmente, las estrellas parecen salir de la constelación boreal de Perseo.
Aunque este fenómeno ocurre cada año, lo usual es que se hagan visibles alrededor de 150 meteoritos o "estrellas fugaces" por hora; pero en ocasiones son hasta 560, y este 2016 será uno de esos grandes años, ya que se estima que durante las noches del 11 y 12 de agosto se puedan ver alrededor de 500 estrellas por minuto.
Las estrellas fugaces reciben ese nombre porque se observan como estrellas que rápidamente cruzan el cielo, pero no son realmente estrellas que se caen. Una estrella fugaz es en verdad una pequeña pieza de piedra o polvo que desde el espacio golpea la atmósfera de la Tierra. Pueden ser muy pequeñas, a veces no son más grandes que una partícula de arena, pero se mueven tan rápido que se calientan y brillan al moverse a través de la atmósfera.
Los astrónomos las llaman meteoros. Cuando escuchamos hablar de un meteoro o meteorito que impacta en la Tierra, se trata de uno de estos fragmentos, pero de gran tamaño, de modo que no llega a desintegrarse cuando entra en la atmósfera.
La constelación de Perseo se ve desde el hemisferio norte y es cerca de ella donde pueden verse más fácilmente la mayoría de los destellos de este fenómeno, por eso es desde allí desde donde puede observarse.
Para ver estrellas fugaces en general, es necesario estar lejos de las luces de la ciudad y también de la contaminación atmosférica. El campo y la playa son los mejores lugares para observar fenómenos cósmicos a simple vista.
No es necesario utilizar binoculares ni telescopios, y tampoco es recomendable, porque achican el cambio de visión. Las estrellas fugaces se ven a simple vista, las verás exactamente como si una estrella normal se estuviera moviendo a gran velocidad.
Para observarlas, recuéstate por la noche en un sitio alejado de la ciudad y oscuro, y observa con atención el cielo. Si haces esto en cualquier momento del año, es posible que veas algún meteoro al cabo de unos cuantos minutos; pero si lo haces entre el 11 y 12 de agosto seguramente verás muchísimos.
Para verlas con más facilidad, deberías mirar hacia la constelación de Perseo. Si no sabes como encontrarla, puedes utilizar un mapa o bien una aplicación como Google Sky Map.