Boca consiguió este domingo, con un categórico 3-0 sobre Independiente en la Bombonera, el partido que necesitaba para demostrar(se) que es el gran candidato al título. Es que, además de la fría matemática que lo ubica cuatro puntos arriba de River con nueve más en juego, el funcionamiento y la actitud del conjunto de Guillermo Barros Schelotto estuvo a la altura de las circunstancias.
Finalmente sin Ricardo Centurión, el Xeneize salió al campo con un firme protagonismo y comenzó a asediar a un Rojo que no hacía pie en ningún lado. Martín Campaña debió aparecer desde temprano frente a Cristian Pavón y Fernando Gago, mientras que Darío Benedetto tuvo una clara que fue despejada en el área chica por el fondo visitante.
Alan Franco cometió un penal infantil con una patada alta sobre Pablo Pérez, a los 28 Benedetto lo cambió por gol con un sablazo bajo a la derecha de Campaña y el partido se encaminó para el anfitrión. A los 44, Pavón envió un centro pasado desde la izquierda y Oscar Benítez lo cabeceó para ampliar diferencias.
El mejor momento del conjunto de Ariel Holan llegó en el inicio del complemento. La más clara la tuvo Ezequiel Barco pero se topó con Agustín Rossi, pero enseguida Junior Benítez exigió a Campaña. Al Rojo se le terminó la nafta rápido ante un rival que se agrupaba bien y defendía su ventaja lejos de su área.
Pérez volvió a la carga contra el arquero con un remate desde lejos, y a los 29 un error de la defensa visitante frente a la presión xeneize permitió que Benítez dejara a Benedetto en inmejorable posición para definir bajo ante Campaña.
Mientras Independiente perdía su largo invicto en la era Holan, el conjunto del Mellizo cerró con una sonrisa una semana que había arrancado con fantasmas y ahora, resultados mediante, hasta puede soñar con consagrarse en la próxima fecha.